Una científica turca ha conseguido eliminar las placas que provocan la enfermedad ELA con extracto de apio. Neslihan Taşlı, investigadora del Departamento de Genética y Bioingeniería de la Universidad de Yeditepe, ha realizado estudios sobre el uso del extracto de apio en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas como la ELA, el páarkinson y el alzhéimer.
Taşlı: «Lo que estamos produciendo es un sistema que permite a la célula tirar su propia basura, y lo hemos conseguido con el apio».
Aunque al principio trabajó en sistemas de tejidos e ingeniería tisular, en los últimos cuatro años se ha centrado sobre todo en el «exosoma», que describió como las «redes sociales de las células», pequeñas vesículas que proporcionan mensajería entre células. Partiendo de la idea de que las plantas tienen la capacidad de percibir estos mensajes, Taşlı y su equipo analizaron algunas verduras y frutas en el laboratorio.
«Uno de mis estudiantes trabajaba entonces en enfermedades neurodegenerativas, así que partimos de ese punto. Primero empezamos con la ELA», señala Taşlı. «En la enfermedad de ELA, realizamos estudios con verduras y frutas para destruir las placas acumuladas en el interior de la célula mediante el uso de exosomas. De las muchas frutas y verduras que revisamos, encontramos que el apio era la más eficaz».
«Iniciamos un proyecto al respecto y lo solicitamos a la Academia Turca de Ciencias [TÜBA]», añade.
Sin embargo, estas enfermedades no pueden curarse solo consumiendo apio, explica Taşlı. «Es importante filtrar el extracto de apio y administrarlo en la dosis adecuada, de forma que quede desprovisto de otras sustancias. El apio es una verdura saludable, pero por mucho que se coma, no puede mostrar el efecto que obtenemos en el laboratorio con solo consumirlo».
Fuente: hurriyetdailynews.com