Compartir:

Los efectos del cambio climático se han traducido en la reducción de zonas productivas a causa de la sequía, lo que invita a innovar en la implementación y diversificación de formas de cultivos. Desde esta necesidad, la empresa Microland, con el apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria y financiado por el Gobierno Regional de O´Higgins y su Consejo, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad, trabajan en la inclusión de tres nuevas especies para su producción en formato microgreens, hortalizas de IV gama que destacan por su bajo requerimiento hídrico. Estos vegetales son productos hortícolas de no más de 15 días de crecimiento, categorizándolos como hortalizas de IV gama y entre sus características destacan por ser productos frescos, limpios y envasados, listos para su consumo.

Se trata del proyecto Microland, un emprendimiento agrifoodtech, que se centra en la producción intensiva de microgreens utilizando las nuevas tecnologías disponibles para mejorar tanto los rendimientos de producción como su diversificación productiva, logrando adaptar tres especies vegetales para incluirlas en la producción de estos alimentos funcionales: quínoa (Chenopodium quinoa), panul (Apium panul) y borago (Borago officinalis).

El coordinador del proyecto, Simón Solís, destacó que “somos los primeros en instaurar la producción de microgreens en la Región de O’Higgins. A nivel nacional, su comercialización es incipiente, pero estos productos se abren camino debido a la conciencia que tiene la gente respecto a cuidar su nutrición. Son vegetales saludables con manipulación mínima y libres de pesticidas respecto a los cultivos tradicionales. Actualmente, hemos podido innovar e introducir quínoa, borago y panul como opciones para ampliar la oferta de microgreens, logrando un avance en la producción de estos superalimentos. Éstos son una alternativa natural a los suplementos alimenticios, ya que se ha demostrado que contienen concentraciones de hasta 40 veces más antioxidantes, vitaminas y/o minerales por gramo en comparación con los cultivos maduros. Además, a través de la implementación de tecnología, hemos aumentado nuestros rendimientos hasta en un 20% con luces de alta eficiencia que permiten potenciar los ciclos mensuales de producción”.

La directora ejecutiva de FIA, Francine Brossard, comentó que “este tipo de cultivos de invernadero, diversifican la oferta alimentaria y, debido a su bajo consumo hídrico, otorgan seguridad a la producción de hortalizas que se ha visto afectada por los efectos del cambio climático. Por otro lado, debo añadir que los microgreens son alimentos funcionales, con alto valor nutricional, por lo que se relacionan con el plan de trabajo que tenemos junto al Ministerio de Agricultura, en que queremos impulsar la alimentación saludable de forma transversal, sin dejar a nadie atrás”.

“La región de O´Higgins es zona de hortalizas y queremos agregar valor a su producción, mejorando los rendimientos en su versión de microgreens a través de la introducción de tecnología, ya que cuentan con diversas ventajas al cultivarse indoor, en huertos verticales de estantería y/o vivero y así, no presentan problemas de espacios. Además, su producción es continua durante todo el año, se controlan y minimizan las variaciones de temperatura y humedad, lo que reduce el consumo de agua hasta en un 90% respecto a hortalizas maduras, se consiguen alimentos con un alto valor nutricional y sin uso de pesticidas”, agregó el coordinador del proyecto, Simón Solís.

Para finalizar, debemos señalar que se ha concretado la primera etapa del proyecto y comenzará su pilotaje para evaluar la recepción de estas nuevas especies por parte de los consumidores, junto con otras cinco especies iniciales: brócoli, rabanito, rúcula, girasol y mostaza que están próximas a ser comercializadas en formato de bolsa, paquete compostable o bandejas de producción.

Compartir:
Compartir:

La agricultura de precisión es una rama de la agricultura que está en boca de todos. Sensores, satélites, datos en tiempo real, monitorización, big data, teledetección, drones, GPS, software SIG, imágenes multiespectrales, mapeo de suelos, índices agrónomicos… todo un mundo tecnológico al servicio de un sector, que posiblemente sea de los más lentos a la hora de implantar estos sistemas. 

 La precisión llega a la agricultura

Todos los sectores productivos llevan años a la vanguardia de las nuevas tecnologías. El sector de la automoción, la industria alimentaria, la medicina, hace uso de las famosas TIC (tecnología de la información y la comunicación) para sacar mejores rendimientos, mejorar sus productos, ahorrar costes, reducir emisiones, salvar vidas (medicina)… Sin embargo, la agricultura, desde el salto a la maquinaria agrícola autopropulsada por motor de combustión, no había vivido una revolución tecnológica hasta el S.XXI con la agricultura de precisión.

¿Qué es agricultura de precisión?

Una definición extensa que se me ocurre sobre agricultura de precisión sería: Agricultura que hace uso de las TIC para la gestión de los cultivos obteniendo una gran cantidad de variables agronómicas que permitan un análisis más preciso de la situación del cultivo con el fin de optimizar al máximo los recursos, ahorrar costes, dosificar con gran precisión las aplicaciones de insumos (agua, fertilizantes, fitosanitarios…), sacar el máximo rendimiento y contribuir a la sostenibilidad de los sistemas agrícolas.

Quizá las haya más cortas, precisas y más o menos acertadas, pero así es como la entendemos en este blog. En resumen: es poner la tecnología de la información al servicio de agricultura para mejorarla, punto final.

¿Dónde está la barrera entre agricultura «convencional» y la llamada agricultura de precisión? 

No resulta muy complicado hacer esta distinción. Como se ha mencionado un par de párrafos más arriba, una de las revoluciones tecnológicas del S.XX en este sector fue la maquinaria autopropulsada por el motor de combustión.

Desde el primigenio tractor hasta las máquinas recolectoras más vanguardistas de hoy en día, no ha habido muchos más cambios —entiéndase cambios como algo de calado global; hablamos de revolución, no de evolución—.

¿Podríamos decir que agricultura de precisión es tener una estación meteorológica en un cultivo, o usar la información de las ya existentes para analizar patrones de clima en nuestra parcela y actuar en consecuencia? En cierta manera sí, solo en cierta manera, y aunque esto se lleva haciendo mucho tiempo, nunca se llamó agricultura de precisión. El término ha cobrado más sentido cuando se han ido añadiendo una gran cantidad de capas de información, obtenidas de diversas fuentes. Además, haciendo uso de esas capas, se consigue que «el laboreo» se haga en consecuencia a esa información.

agricultura de precisión

La explicación

Si mediante una imagen de satélite, sacando algún índice agronómico de su cámara multiespectral, conseguimos saber las necesidades de fertilización de un cultivo, ya no solo a nivel global, sino a nivel mucho más concreto, podremos aplicar una dosis de fertilizante variable según esos datos y ahorrar muuuuucho dinero en algo tan caro como un fertilizante. Esto sería una primera fase de la agricultura de precisión: La toma de datos, su análisis y la interpretación de los mismos.

Resulta evidente que estos resultados en forma de mapa de necesidades de fertilización deben ser interpretados por un software que lleve nuestra dosificadora para saber en cada momento, cuánto fertilizante echar según ese mapa. Todo ello guiado por GPS. Ahí ya, estamos consiguiendo la cuadratura del círculo y eso ya es agricultura de precisión seria. Esta fase sería una segunda fase: Toma de decisiones y ejecución en función de la primera fase .

Hay muchos más ejemplos pero hoy no es el día de entrar en ellos. Queremos dar una breve pincelada de todo esto para, en un futuro no muy lejano, meternos más en materia. A continuación comentaremos algunas de las técnicas que se aplican. En otros artículos posteriores nos meteremos a fondo en cada una de ellas.

¿Qué tecnologías hay?

Maquinaria de conducción autónoma guiada por GPS

En el ejemplo anterior es una de las tecnologías aplicadas al servicio de la agricultura, maquinaria que es capaz de cubrir una parcela según un plan preestablecido por el agricultor. El conductor, una vez en la parcela, sólo tiene que vigilar la telemetría del proceso para que todo vaya según el plan establecido. Y sí, hablo de telemetría, como en la Fórmula 1, la agricultura también tiene de eso hoy en día.

Imágenes de satélite y de drones

Las imágenes de satélite y de drones, son imágenes captadas por cámaras un poco especiales que sacan fotografías aéreas de los cultivos en espectros no visibles para el ojo humano, como el infrarrojo. Con los datos obtenidos de estas cámaras podemos conocer, por ejemplo, el estrés hídrico o el vigor de un cultivo y a partir de ahí tomar las decisiones pertinentes.

Los hay de iniciativa pública como Landsat (NASA), los actuales Sentinel (ESA) y privados (Quickbird, Deimos, Wordlview…). Actualmente los de mayor resolución son privados y la adquisición de imágenes es cara. De todas formas, la Agencia Espacial Europea (ESA) ha lanzado este año 2 satélites multiespectrales de bastante resolución, con bastante aplicación en la agricultura de precisión, pudiendo llegar a una resolución de 10m/pixel que resulta más que suficiente para analizar ciertos cultivos, cereales por ejemplo. La adquisición de imágenes de Sentinel es totalmente gratuita.

Una curiosidad al margen de la agricultura de precisión

Nos creemos que tenemos unos pocos satélites volando alrededor del globo (el METEOSAT, los del GPS, los de Google Earth y pocos más verdad?) Aquí te dejo un enlace a una web para que veas la cantidad de satélites y restos de cohete y basura espacial orbitando alrededor del globo que está acumulando la humanidad. ¡Es impresionante!

El mundo del drone está despertando y va cogiendo fuerza. Son muy útiles para un montón de disciplinas y la agricultura no se queda corta. Drones con cámaras multiespectrales, térmicas, LiDAR… que nos permiten una precisión que por ahora es imposible que un satélite nos pueda dar. Además no tenemos el efecto de las nubes ni hay que hacer tantas correcciones como en la foto de satélite (por la distancia y las interferencias de la atmósfera en la imagen). A misma resolución son más baratos que un satélite privado y nos aseguramos siempre la máxima calidad de imagen. Los últimos drones son capaces de cubrir más de un centenar de hectáreas en un solo vuelo.

agricultura de precisión

Sensorización en parcela

en realidad son estaciones meteorológicas (algo menos precisas que las que se utilizan para climatología) pero más baratas y específicas según nuestras necesidades. Sensores de humedad ambiental, temperatura ambiental, humedad y temperatura a distintos niveles de profundidad del suelo, pluviometría, dirección y velocidad del viento, radiación solar, humectación foliar, dendrómetros… un sin fin de parámetros que se pueden medir y almacenar en memorias que se vuelcan y sirven para estudiar estados del cultivo y su relación con variables agronómicas del cultivo, plagas, etc. Este tipo de información es muy útil para hacer predicciones de aparición de plagas, predicciones de estados fenológicos… ¿os acordáis del artículo de la integral térmica?; pues tiene mucho que ver.

Mapeo de suelo

Otra de las capas de información que podemos conseguir mediante una maquinaria específica. Este dispositivo se pasea por nuestra parcela y nos dice una gran cantidad de parámetros del suelo. El análisis de un suelo agrícola en laboratorio es caro y además son datos extraídos de un muestreo puntual en distintos puntos de parcela. Pero un suelo es mucho más complejo y cambiante de lo que parece y podemos tener mucha diferencia a 20 metros de distancia. Con estos mapas de suelo, tenemos información continua de toda la parcela con parámetros como pH, conductividad eléctrica, textura, macronutrientes principales (NPK).

agricultura de precisión

Big Data

La computación en la nube, el análisis de Gigabytes e incluso Terabytes de datos. Todos estos datos que recogemos de los diferentes sensores, imágenes, cuadernos de campo. Toda, absolutamente toda la información es útil, y sobre todo si es mucha la cantidad, ya que algoritmos estadísitcos más y menos complejos son capaces de sacar patrones de comportamiento que nos ayudan a tomar decisiones acertadas en cuanto a: momento y dosis de aplicación de fertilizantes y fitosanitarios, predicciones de cosecha, predicción de heladas, necesidades de riego en tiempo real e incluso accionamiento del riego automático en función de todos estos análisis… todo un mundo.

¿Es una panacea tal y como nos la están vendiendo

Pues como  todo, tiene su aplicación a muchos niveles. Cada tipo de tecnología (mapeo de suelo, drones, sensores…) dan diferentes capas de información que pueden sernos más o menos útiles dependiendo de nuestro objetivo, tamaño y tipo de cultivo y necesidades de optimización. Es una nueva agricultura mucho más tecnificada y desde luego traerá mejoras, ahorros al agricultor y un beneficio global que es una agricultura más sotenible. Esta agricultura está pensada para medianas y grandes superficies, donde la optimización de recursos tiene un papel más que fundamental.

agricultura de precisión

¿Podemos aplicar la agricultura de precisión a nuestro huerto o jardín?

Ajá! Como sabemos que muchos de nuestros lectores tienen pequeños huertos de autoconsumo, esta es una gran pregunta que tiene una ambigua respuesta. La primera es NO. No vamos a pasar un vuelo de drone por nuestra huerta, ni haremos un mapeo de suelo de una parcela de unos pocos cientos de metros cuadrados.

La otra respuesta es SI!, por supesto podemos sensorizar ligeramente un jardín o un huerto y eso sí podría ser introducir un poco de precisión en el manejo de nuestros cultivos o plantas ornamentales. Os ponemos un pequeño ejemplo:

Riego con aspersores en jardín y goteo en el huerto, gobernado por un programador de riego que lleva una sonda de humedad o sensor de lluvia y sólo regará días después de haber llovido o cuando la humedad del suelo caiga por debajo de un límite. ¡Ahí tienes agricultura de precisión en tu pequeño jardín!

Compartir: