Hoy toca la remolacha roja o remolacha de mesa. Dependiendo de lugares, ya podemos pensar en sembrarla en nuestro huerto. El cultivo de remolacha es agradecido, no da problemas y las propiedades nutritivas son muy reconocidas.
Te ponemos en antecedentes antes de cultivar
Lo primero decir que la remolacha es la acelga. ¿Te lo imaginabas? La acelga es una subespecie de la remolacha que interesa más por sus hojas que por sus raíces. Pero las dos son Beta vulgaris. Es una Quenopodiácea. Hay diversas variedades destinadas para fines concretos. Ya conocemos la famosa remolacha azucarera y existe la forrajera para el ganado. La que nos interesa hoy para nuestro huerto es la remolacha de mesa. La que solemos comer cocida en ensalada. Tiene una importante cantidad de flavonoides (son antimicrobianos, anticancerígenos y disminuyen la hipertiensión arterial. Sus dos pigmentos (betacianina y betaxantina) indigeribles para nuestro organismo (lo veréis si la coméis ;-)) son utilizados en la industria como colorante alimentario.
Empecemos con el cultivo de remolacha. Clima
En el aspecto climático tiene un aguante ejemplar. Prefiere climas templados y húmedos pero aguanta bien el calor, el frío, las heladas (hasta cierto punto). Un portento de planta en lo que ha condiciones climáticas se refiere. Cuando los periodos de cultivo son tirando a fríos, la remolacha alcanza su mayor calidad. Sin embargo, cuando son más cálidos, el engrose de la raíz puede ser algo mayor.
Preferencias de suelo
Para el cultivo de la remolacha necesitamos suelos medios y ricos en humus. No le vienen bien partes de compost o abono poco descompuestos. Es mejor haber tenido un cultivo precedente al que se le haya añadido una buena parte de compost, para que lo que queda de ese compost esté bien descompuesto. Es una hortaliza que a diferencia de la gran mayoría resiste suelos pesados y arcillosos, aunque no es su ideal porque las raíces se deformarán con este tipo de suelo. Si son arenosos y más ligeros tendremos una mayor precocidad.
Frecuencias y dosis de riego para el cultivo de remolacha
El cultivo de la remolacha de mesa requiere de un riego moderado pero con una alta frecuencia. Es mejor regar menos y más veces de forma que consigamos un nivel de humedad en el suelo lo más constante posible. Los suelos secos entre riegos provocarán que la remolacha se parta.
Cultivo de remolacha. Siembra
La semilla de remolacha, tal y como la vemos, es una cápsula o fruto y dentro de él, están las semillas en sí mismas. Una de las ventajas de este cultivo es que podemos hacer siembra directa en el huerto sin pasar por semillero, lo que facilita bastante la previsión y el inicio del cultivo. Al crecer varias semillas juntas será necesario hacer un aclareo cuando empiecen a crecer para dar más vigor a las plantas que queden. Si vivimos en zonas cálidas, podremos disfrutar de ellas durante todo el año hasta que nos hartemos. En zonas más frías del norte se suele sembrar a partir de finales de marzo. Zonas más templadas en febrero.
Cultivo de remolacha. Semillas en el huerto
Semillas de remolacha
Fuente: frogstarfarm.com
Recolección de la remolacha de mesa
En aproximadamente 3-4 meses tendremos la remolacha lista para su consumo. En condiciones climáticas cálidas y con variedades precoces es posible que lleguen a término en 2 meses.
Para su consumo, lo más común es la cocción. Se recomienda lavarlas y no quitarles la hoja o dejarles algo. Nunca quitar la raíz o pelarlas. Perderemos todos los pigmentos y muchos de sus nutrientes y sabor. Cocer toda la planta durante 1 hora aproximadamente. Una vez cocidas se pelan y se pueden consumir. Otra opción es asarlas al horno hasta que estén tiernas. Mantienen mejor sus propiedades. También se pueden comer crudas aunque resultan menos digeribles. Cuestión de gustos.
Cultivo de remolacha
Cocción de la remolacha
Fuente: paradeladecoles.blogspot.com.es
Variedades
Plana de Egipto: Buena en precocidad. La raíz es más aplastada. De rojo intenso y de sabor dulzón pero tiene la carne algo más dura que la variedad Detroit.
Detroit: De forma redondeada y rojo oscuro. Carne muy fina y dulce. Se puede sembrar todo el año. Es de las más conocidas por su versatilidad y buena calidad.
Cylindra: Como su nombre apunta, es más alargada. La forma cilíndrica se presta más a procesado industrial que la presenta en rodajas.
Otras variedades: Claudia, Globo rojo, Faro, Rubidus
Fuente: agromatica.es