La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), adscrita al Ministerio de Consumo, pidió este martes “prudencia” para “no generar alarma” en torno a un brote de Salmonella registrado en Noruega y que el país nórdico asocia al consumo de pepinos españoles.
Así lo precisaron a Servimedia fuentes de dicha agencia a raíz de una información adelantada por el diario El País, a partir de una información emitida por las autoridades noruegas. Las mismas fuentes puntualizaron que la información sobre la “posible procedencia española” de los alimentos “no está confirmada”.
Asimismo, aseveraron que la información que notificó Noruega mediante el Sistema Rápido de Alertas de la UE (RASFF) “no es concluyente” ni está “suficientemente verificada”, por lo que, a su juicio, podría deberse a “otro alimento”.
La Aesan ya se ha puesto en contacto con el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias y las autoridades autonómicas para, en el caso de que se tratase de un alimento de origen español, “tener analizada la trazabilidad”.
Brote en Noruega, Países Bajos y Suecia
El Instituto de Salud Pública de Noruega informó que un total de 72 personas en el país fueron diagnosticadas con la bacteria gastrointestinal Salmonella agona entre finales de octubre y principios de diciembre, 24 de las cuales requirieron hospitalización.
Después de analizar más de 50 entrevistas de pacientes e información de compra, se supo que “casi el 90 por ciento de los infectados habían comido pepino la semana antes de enfermar”. Este estudio ayudó a descartar otras hipótesis como fuente de infección en este brote y, «tras un extenso trabajo de rastreo por parte de la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria», se identificaron determinados lotes de pepino de un proveedor español “como la fuente más probable de infección”.
Además del brote en Noruega, también se han notificado casos con la misma cepa en Suecia y los Países Bajos en el mismo período. Sin embargo, el hecho de que no se hayan reportado nuevos casos de enfermedad en las últimas semanas podría indicar que “el producto contaminado ya no está en el mercado” y que “el brote probablemente haya terminado”, indica el comunicado, “aunque no puede descartarse que aparezcan más casos”.
Fuente: fhi.no / noticiasdesalud.es